El Chapulín Colorado no existe

Este gobierno ha llegado a extremos insospechados. 

El presidente se contradice según le convenga y sus cómplices están saqueando al país. Por el puerto de Veracruz salen madera y metales preciosos, la fuga de capitales se ha intensificado gracias a la incertidumbre puesto que no hay estado de derecho, la impunidad rampante amenaza a las familias mexicanas... y mientras tanto, las focas le aplauden cada flatulencia al "empeorador". 

La polarización de la sociedad es el mayor logro del peje, eso y engañar a un porcentaje de la población, pero veamos, las encuestas (que no son gratis) dicen que tiene un 50 - 60 % de aprobación, sin embargo, en la consulta para la reelección anticipada (ratificación) solo lograron 14 millones de votos y está documentado que muchos de esos fueron gracias a urnas embarazadas, votos bajo amenaza e incluso muchos muertos votaron, es decir, hicieron su mejor esfuerzo y de aquellos míticos 30 millones que votaron por la farsa de la cuatrote solo quedan 14. 

El padrón electoral es de 90 millones, entonces, las matemáticas reales (no las "creativas" que usan los morenazis) nos indican que 116 millones de mexicanos no apoyan al peje, claro que no podemos considerar a los niños, sería también un ejercicio mañoso, pero, 90 millones de electores menos 14 son 76, nada más y nada menos que setenta y seis millones de mexicanos con credencial de elector que no van a votar por morena. 

Pero el problema es que la mayoría no va a votar por nadie y esa es la apuesta del peje, el abstencionismo, que a la gente le cause tanto asco la política que se desentienda por completo de ella. Y esa debe ser nuestra lucha, lograr una mayor participación ciudadana para que la derrota de los que hoy nos tienen sumidos en una pesadilla sea contundente, absoluta, puesto que como vimos en las elecciones internas de morena, no saben perder y van a intentar "reventar" las elecciones a como de lugar. 

Hace ya 112 años que se fraguó la guerra civil a la que en la escuela nos enseñaron a llamar "Revolución Mexicana". Nuevamente son tiempos de tribulaciones, como entonces, pero ahora tenemos internet y podemos enterarnos en tiempo real de lo que sucede, debemos entender que no podemos ser ajenos a la situación, se requiere de la participación de todos para decir "ya basta, lárguese, vuelva a La Chingada (su rancho) de donde nunca debió haber salido". 

Y luego claro meterlo a la cárcel a él y a sus cómplices, no sin antes embargarles todo lo que se están robando.

México es mucho más grande que un puñado de oportunistas. Podemos y debemos rescatarnos. Si no lo hacemos nosotros... ¿Quién? 

P.D. El Chapulín Colorado, como los políticos honestos, no existe.